
El Neo Bistró del Garage en Biarritz
En un entorno vintage y colorido, el restaurante del hotel boutique Le Garage Biarritz te invita a disfrutar de un paréntesis gourmet, generoso y lleno de frescura. Bajo la dirección del chef Tristan Rieubernet, el Neo Bistró cobra nueva vida con una carta vibrante y mestiza, pensada para compartir, emocionar y sorprender.
Una cocina colorida, equilibrada e inspirada
Formado en el Centro de Excelencia de Profesiones Culinarias en París, este chef originario de Toulouse crea platos que reflejan sus influencias: el alma del suroeste francés, las técnicas aprendidas junto a grandes nombres como Christophe Grosjean o el MOF Zozaia, y los aromas traídos de sus viajes por Asia oriental. El resultado es una cocina rica en contrastes: elaborada pero accesible, generosa pero ligera, donde las hierbas, los encurtidos y los toques cítricos aportan frescor y complejidad.
La carte
Les drinks
Le petit-déjeuner
Abierto todos los dias



Platos para compartir
El espíritu del Garage se expresa también en el formato de la carta: platos pensados para picar, probar y compartir. Zanahorias glaseadas al zumo de naranja, caballa a la llama con crema de almendras frescas, burrata de Bilbao con pesto de ajo silvestre o tataki de atún rojo de Saint-Jean-de-Luz: cada plato está cuidadosamente trabajado, pero se sirve en un ambiente relajado, ya sea en el comedor abierto, en la terraza o junto a la piscina.
Clásicos reinterpretados con audacia
Algunos platos resumen a la perfección la firma del chef, como el taloa de maíz Grand Roux. Aquí, la tradicional galette vasca se transforma: cerdo confitado, crema cruda con cardamomo, encurtido de pimientos rojos, trigo sarraceno inflado y cilantro fresco componen un plato con raíces, pero sorprendente. En esa misma línea, la panceta laqueada de cerdo Kintoa, servida con granola crujiente de maíz y confitura de mango especiada, encarna esa cocina de contrastes: potente, precisa y siempre inesperada.



Para los amantes de los dulces,
Los postres continúan el viaje con clásicos reinventados: tartaleta de vainilla de Madagascar con fresas, sorbete de fresa y verbena; pavlova con combawa, crema cruda de haba tonka, higo asado y gel de limón tostado. Sin olvidar el pastel vasco de la Maison Loubère, acompañado de sorbete de cereza negra.

El restaurante está abierto al mediodía y por la noche,
En el corazón del patio y frente a la piscina, ofrece un descubrimiento culinario de los sabores locales del País Vasco. ¡Es al aire libre donde ocurre todo! Bajo el sol, en la bonita terraza con vistas a la piscina y al jardín, con mobiliario colorido, el restaurante del Hôtel le Garage Biarritz es un verdadero oasis urbano en Biarritz. Este lugar emblemático de la Costa Vasca es el sitio perfecto para un desayuno rápido, un almuerzo junto a la piscina, una cena o una última copa con amigos.

